lunes, 18 de diciembre de 2006

Los antimineros muestran las garras

El pasado fin de semana del 16 de Diciembre el Sr. Gobernador de Mendoza, Julio Cobos, fue vícitima ausente de las protestas de supuestos ambientalistas. Aparentemente disconformes por la decisión del gobernador de vetar la ley anticonstitucional que prohibía la actividad minera en el territorio provincial, estos personajes se dedicaron a pintar la casa de Cobos, y de atacar verbalmente a su hija (ver Los Andes del 17-12-06).
Esta actitud no es nueva para los autoconvocados o ambientalisitas. Ya sucedió en Esquel cuando atacaron camionetas de empresas mineras, o está sucediendo en Esquel ahora mismo haciendo discriminación contra los mineros no dejándolos entrar a algunos comercios de la ciudad. Sucedió en Chilecito cuando en un concierto se comparó a la activididad minera con el genocidio de la última dictadura (???). Son distintas formas de violencia, material, verbal, discriminatoria, pero violencia al fin.
Será que están dándose cuenta que están defendiendo una causa insostenible? Cuando se deja de razonar (cosa que nunca hicieron) y se ven abrumados por la fuerza de la verdad, esta gente comienza a utilizar métodos más bárbaros.
Creo que a pesar de ser un mal método para defender ideas, esta actitud es una señal para la sociedad que indica que las mentiras no se sustentan por mucho tiempo.
El monstruo minero que nos quisieron vender, se está desvaneciendo.
Hasta la próxima.